Es una realidad que hay que formarse para poder ejercer una determinada práctica. Pero al mismo tiempo se puede considerar que el solo formarnos en una disciplina determinada o en la especificidad de una disciplina no resulta para nada suficiente, sobre todo teniendo en cuenta los ámbitos en los que se mueve un psicólogo, llámese instituciones, consultorios, centros de salud, etc. En términos aristotélicos, diría que la formación profesional es condición necesaria , pero no suficiente para el ejercicio de la psicología, sobre todo clínica. Incluso creo yo que sería ilusorio pensar que solo por formarnos nuestro trabajo se vuelve menos conflictivo o más saludable. Por su puesto que ayuda… y está famosa metáfora del bisturí del médico… si se lo sabe usar, cura, pero si está oxidado, mata. Yo, particularmente, veo ahí una cuestión muy compleja en el caso de los psicólogos. A partir entonces de esta complejidad del trabajo, específicamente del trabajo de los psicólogos al interior de las